Joe Hallenbeck (Bruce Willis) es un ex agente de los servicios secretos de los Estados Unidos, reconvertido en un detective privado desencantado de la vida. Un día descubre que su mujer Sara (Chelsea Field) le engaña con Mike Mattheus(Bruce McGill), su mejor amigo y socio de negocios. Ese mismo día Mike muere en un extraño accidente de coche, tras encargar a Joe la protección de una stripper llamada Cory (Halle Berry).
Mientras Joe cumple su labor, se cruza con el novio de Cory, la recién retirada estrella de fútbol americano, Jimmy Dix (Damon Wayans), quien había sido expulsado de la liga, por consumir narcóticos. Posteriormente Cory es asesinada, por lo que Joe y Jimmy se unen para buscar la solución al misterio. De esta forma descubren el enorme plan ideado por el dueño del equipo de fútbol americano Los Angeles Stallions, Sheldon Marcone (Noble Willingham). El excéntrico millonario pretende legalizar las apuestas en este deporte, y para eso decide sobornar a todos los integrantes de la comisión para que voten a favor. El senador Calvin Baynard (Chelcie Ross) es el único que no se deja sobornar, a menos que sea por una millonaria suma de dinero. Ante eso, Marcone decide aniquilarlo y culpar de su muerte a Joe Hallenbeck.
Una película entretenida, de acción o policiacas creo que hay mejores.
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